lunes, marzo 20, 2006

Familia Paraiso

El domingo fue un día muy complicado, era el final de un merecido descanso después de lo que me toca por venir. Sentí como nunca una necesidad de no irme de quedarme en mi ex-casa, no me paso esa experiencia de ya querer regresar a la ciudad donde trabajo. La tarde de ayer mi hermano trajo una película para verlas todo, era “Cinema Paradiso”. Recuerdo que ya la había visto hace un par de años. Fue avanzando la película y al final termine con unas cuantas lagrimas. La película me hizo acordar muchas cosas de mi niñez y parte de mi adolescencia. Más sobre todo la parte en que el personaje “toto” deja su ciudad natal para tener otro futuro mejor. Algo así me paso a mi, Salí casi escapando de mi casa y fue duro el cambio, pero me sirvió para avanzar en esta vida. La vida con nuestros padres es muy hermoso, pero es necesario volar con nuestras propias alas. Es ahí cuando uno empieza a valorar cada oportunidad que nos dieron ellos y que no supimos valorar. Cinema Paradiso me dejo la reflexión de en cada vuelta mía saborear el calor de hogar y tengo una envidia sana por mis hermanos por estar día a día con mis padres.

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